Almanaque de otoño

 

Almanaque de otoño

Título original: Öszi almanach

Año: 1985

País: Hungría

Género: Drama

Dirección: Béla Tarr

Guión: Béla Tarr

Duración: 01:55:16

Reparto: Hédi Temessy, Erika Bodnár, Miklós Székely B., Pál Hetényi, János Derzsi

Idioma: Húngaro con sub. en español

Sinopsis: Hedi, su hijo János, la enfermera Anna, el amante de Anna, Miklósz, y el profesor Tibor introducido por János son los individuos que se enfrentan a puertas cerradas. El socialismo y sus problemas han dejado de existir por completo como telón de fondo del conflicto para Bella Tarr. Por algo la película ha tomado de Dostoievski el epígrafe que el autor de Demonios tomara a su vez de Pushkin: “Aún si me guías, esta tierra es desconocida. Probablemente sea el diablo quien señala el camino, vagando y dando vueltas en círculos”. Lo que guía y extravía a los cinco protagonistas es el diablo que los hace girar en círculos. El problema de cada uno de ellos en efecto no es tan sólo imponerles a los demás sus intereses y sus deseos; sino hacerlos sufrir.

Iba yo caminando, apresuradamente como siempre, y al pasar por una librería oigo una voz interior que me dice:”...entra… entra”.

Mi yo, mi super yo y mi ello le contestan: “No entrés, seguí de largo”….

Una vez adentro, me tropiezo con una estantería y se me cae en la cabeza un librito:

Bela Tarr – después del final de Ranciere, con una foto de la carátula de “El caballo de Turín” en su contratapa.

Y bueno, vengo a descubrir con esta imposición del destino, que mi relación con Tarr nació a partir de su segunda etapa, del increíble blanco y negro, de lo que Rancière llama “los films de la madurez de Tarr… películas cada vez más oscuras, donde la política se reduce a la manipulación, la promesa social a una estafa y lo colectivo a la horda brutal”.

Este Tarr a mi, se me mete por los poros.

Pero del otro, “el del joven cineasta indignado”, no tenía casi registro.

Escaneé la introducción del libro, y las pag. correspondientes a este film. Va en formato pdf y para los “modernos” como yo, también lo pasé a “mobi” (¿Qué tul?)